El guitarrista de la banda homónima tiene un nuevo álbum, 'Sin', y una gira por Estados Unidos con Geoff Tate.
Adrian Vandenberg, el guitarrista neerlandés conocido por su trabajo con las bandas Whitesnake y Vandenberg, ha estado ocupado últimamente.
Su grupo homónimo acaba de lanzar un nuevo álbum, 'Sin', y se embarcará en una gira por Estados Unidos con el ex cantante de Queensrÿche Geoff Tate a finales de este mes.
En una nueva entrevista, Vandenberg habló sobre diversos temas, incluyendo su experiencia grabando y de gira con Whitesnake en la década de 1980, los desafíos de telonear para Kiss y la difícil tarea de equilibrar el rock duro y los arreglos comerciales en la música de Vandenberg.
Sobre tocar con Whitesnake, Vandenberg dijo:
"David Coverdale quería a alguien que pudiera darle riffs pesados pero melódicos. Eso era perfecto para mí". Sin embargo, las extenuantes giras resultaron difícilmente manejables. "Estaba exhausto mental y físicamente",
admitió.
Vandenberg también reveló que abrir los shows de Kiss en los 80 fue intimidante, ya que la banda atraía a fanáticos incondicionales que sólo querían ver al grupo principal.
"Tocábamos ante 20.000 personas cada noche, de las cuales tal vez 50 habían venido a vernos",
recordó.
En cuanto a su nuevo álbum con su banda epónima, Vandenberg explicó el equilibrio entre el hard rock y la musicalidad ampliamente comercial:
"Quería que el disco tuviera fuego, actitud y agresión, pero también algo de brillantez".
Vandenberg demuestra que, a los 65 años, aún tiene mucho que ofrecer con su guitarra.
Los fanáticos del rock pesado seguramente disfrutarán de 'Sin' y sus próximos conciertos.
El álbum SIN es muy pesado en guitarras y muestra tus fortalezas tanto como compositor y como intérprete. ¿Qué esperabas lograr entrando en este disco?
Adrian Vandenberg: Puse mucho enfoque en este álbum con respecto al sonido que tenía en mente, y quería que fuera un poco más grande y pesado que el álbum 2020, porque habíamos hecho un montón de shows desde el 2020. Debido a esto, sabía lo poderoso que sonaba la banda en vivo, así que quería tratar de capturar eso más en este álbum que en el 2020. Básicamente, la mayoría tiende a suavizarse cuando llevan en el negocio tanto tiempo como yo, pero yo tengo tendencia a ir en la otra dirección.
Además de tu guitarra, también eres pintor. ¿Abordas el proceso de hacer música de manera muy similar a cómo te aproximas a un lienzo vacío?
Vandenberg: Bastante. Siempre he hecho las dos cosas simultáneamente desde que era niño. Un momento estaba detrás del piano o tocando la guitarra y al otro momento simplemente estaba pintando y dibujando. La portada que pinté para este álbum en realidad fue la primera vez en 1986 que pinté en ese estilo ochentero. Hice las pinturas para el segundo y tercer álbum de Vandenberg, en una época en que me gustaban mucho tipos como Salvador Dalí y los pintores hiperrealistas americanos. Con los años, al igual que mi música, se ha vuelto más expresionista, un poco más agresiva y más espontánea.
¿Te molesta que haya tres versiones diferentes de sencillos de 'Here I Go Again' con tres guitarristas y solos diferentes? La versión de John Sykes, la de Dan Huff y tu versión?
Vandenberg: Debo decir que no estoy familiarizado con la versión de Dan Huff, aunque sé que esa nunca despegó realmente en Estados Unidos ni en ningún otro lugar. Básicamente, todo el mundo siguió tocando la versión del álbum en la que toco. Tampoco he escuchado la versión de Sykes, tal vez haya un bootleg dando vueltas porque la razón por la que David Coverdale y Geffen Records me pidieron que le diera mi sello Vandenberg, por así decirlo, fue porque encontraron que lo que Sykes hizo en la versión original del '87, me lo describieron como "una versión heavy metal de una canción country y western". No pensaron que fuera tan adecuada para la radio, por así decirlo, y aparentemente tenían razón sobre mi versión porque se convirtió en un gran éxito.
Cuando empezaste con Vandenberg, ¿pensaste que terminarías siendo parte del vertiginoso éxito comercial de Whitesnake?
Vandenberg: Siempre hice música porque quería hacer música. Nunca soñé siquiera con la etapa en la que terminé con Whitesnake, tocando en estadios y arenas todas las noches. Así que para mí, todos los días cuando me despertaba pensaba: "Guau, nadie me va a quitar estos recuerdos, y si todo se acaba mañana, volveré a vivir de mis pinturas".
Vienes de una era en la década de 1980 cuando los guitarristas eran los héroes del día y los solos de guitarra eran los reyes. ¿Eso te puso mucha presión como guitarrista?
Vandenberg: Nunca me importó lo de la guitarra. Básicamente me bombardearon como tal. Recuerdo cuando salió el primer álbum de Vandenberg, hubo un artículo en la revista Kerrang! en Inglaterra y decía que iba a ser el próximo héroe de la guitarra. Y yo estaba como, '¡Mejor empiezo a practicar!' Porque nunca lo vi así. Sólo me encanta tocar, y por eso toco.
"Burning Heart", del debut de Vandenberg, te dio tu primer éxito en el Top 40 americano. ¿Qué recuerdas sobre la grabación de ese álbum?
Vandenberg: Lo hicimos muy rápido. Grabamos el primer y segundo álbum en el estudio The Mill de Jimmy Page, ambos en unas dos semanas y media, incluyendo la mezcla. Lo grabamos bastante en vivo, y agregué un poco de teclados para que fuera un poco más orquestal, que es lo que también hice en el segundo álbum, agregando algunos toques de teclados aquí y allá. Y básicamente eso fue todo. Fue muy emocionante grabar en el estudio de Jimmy Page.
Tu primera gira por Estados Unidos fue de telonero de Ozzy Osbourne. ¿Cómo fue girar con el Príncipe de la Oscuridad?
Vandenberg: Fue una gira muy loca, y Ozzy era un tipo muy agradable, a diferencia de la gira que hice con Kiss al año siguiente. Ozzy nos decía que nos encargáramos del soundcheck, ya que según él no lo necesitaba. También nos dio uso total de las luces y el sonido. Mientras que la gira con Kiss que hicimos al año siguiente fue más difícil, porque Kiss parecía estar en una crisis de identidad, ya que se habían despedido del maquillaje blanco y negro, y lo habían cambiado por el rosado, aunque seguían usando mucho maquillaje. Pero estábamos de gira porque acabábamos de tener un gran éxito con "Burning Heart", así que nos fue muy bien, y a los de Kiss no les gustó. Dos días después ya no se nos permitía usar tanto sonido. Luego no se nos permitía usar tanto del escenario y las luces, y así se fue encogiendo más y más. ¡Pero cuanto menos se nos permitía usar, más duro trabajábamos!
En algún momento estábamos tocando en un par de metros cuadrados casi a oscuras y con poco sonido, pero el público seguía enloquecido, porque nos amaban. Esas experiencias son las que realmente hacen crecer a una banda y a un músico. Así que dices: "¿Sabes qué? Al carajo, voy a hacer lo que pueda para que sea un gran espectáculo y ver qué pasa".
Mirando hacia atrás en tu carrera, ¿harías algo diferente o cambiarías algo?
Vandenberg: No creo. Quizás habría aprendido también guitarra clásica. Todavía estoy feliz de haberlo hecho de esta manera porque si hubiera tomado estudios clásicos en ese momento, estoy bastante seguro de que habría dado forma a mi estilo de tocar de manera diferente. Porque en ese momento no había educación previa de jazz o rock. Probablemente lo habría hecho, pero dicho esto, si me hubiera tenido que enfocar en la guitarra clásica, probablemente no habría terminado haciendo lo que hago ahora.
Recientemente has anunciado que Vandenberg saldrá de gira en 2024 en una función con Geoff Tate. ¿Qué pueden esperar los fanáticos escuchar en la próxima gira?
Vandenberg: Antes de juntarnos haremos una semana y media de shows como cabeza de cartel nosotros solos, y luego una doble cabeza de cartel con Geoff Tate. Así que va a ser interesante. Por supuesto, él ha hecho grandes cosas en el pasado y lo seguirá haciendo, al igual que nosotros, con mucho de su material más temprano. Voy a enfocarme más en el material que hice con Whitesnake, especialmente para los shows en Estados Unidos.